Te doy la espalda por un minuto para mirarme en el espejo y a ti te parece la oportunidad perfecta para acercarte y poner tu cuerpo contra el mio. Mis sentidos se activan de inmediato como si pasase un interruptor; así que lo siento todo, tu aroma a día cansado y noche fría, tu aliento a cigarrillo, tu respiración constante revolviendo mi cabello, haciéndole cosquillas a mi cuello, tus cálidos besos en mi hombro que hacen contraste con lo helado de tus dedos en mi cintura.
Intento girarme para verte a la cara, porque necesito saber más de lo que sientes. Pero no me lo permites, en cambio siento que me envuelves en tus brazos, y pierdo otro poco de estabilidad. De repente no puedo confiar en mis ojos. Todo se vuelve difuso, los colores se mezclan, todo va muy rápido. Es contradictorio. Querer frenar y acelerar a la vez.
Miro por encima de mi hombro, y me besas frenéticamente, mi corazón retumba en mi pecho como el motor de una maquina encendiéndose, y siento que he pasado mucho tiempo sin respirar, pero tus labios son tan suaves, tan dulces, lo último que quiero es apartarme. Tu lengua se abre paso entre mis labios y a mi se me escapa un suspiro en tu boca.
De pronto, empieza a esfumarse la ropa. Como si piel con piel nos entendiéramos mejor. Como si nuestros cuerpos pelearan por unirse. Y no decimos nada, solo nos dejamos llevar por nuestros sentidos, dejamos que nos guíen, a donde sea que quieran llegar.
Intento girarme para verte a la cara, porque necesito saber más de lo que sientes. Pero no me lo permites, en cambio siento que me envuelves en tus brazos, y pierdo otro poco de estabilidad. De repente no puedo confiar en mis ojos. Todo se vuelve difuso, los colores se mezclan, todo va muy rápido. Es contradictorio. Querer frenar y acelerar a la vez.
Miro por encima de mi hombro, y me besas frenéticamente, mi corazón retumba en mi pecho como el motor de una maquina encendiéndose, y siento que he pasado mucho tiempo sin respirar, pero tus labios son tan suaves, tan dulces, lo último que quiero es apartarme. Tu lengua se abre paso entre mis labios y a mi se me escapa un suspiro en tu boca.
De pronto, empieza a esfumarse la ropa. Como si piel con piel nos entendiéramos mejor. Como si nuestros cuerpos pelearan por unirse. Y no decimos nada, solo nos dejamos llevar por nuestros sentidos, dejamos que nos guíen, a donde sea que quieran llegar.
Hola! Te quedo muy bien el escrito.
ResponderEliminarBesos.
¡Hola!
ResponderEliminarPero cómo escribes así de bien ¡Me ha encantado!
Besitos :)
Guao a mi opinión me gusto. Esta buena..
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